Cantando bajo la pálida luz de la luna...

Caminaba en el bosque que estaba muy oscuro pero había un pequeño destello de luz de luna que alumbraba mi camino, mientras caminaba y saltaba uno que otro obstáculo comencé a cantar.
El aire soplaba frío y había olvidado mi abrigo pero no me importaba porque amaba sentir la brisa en mi rostro y que esta jugara con mis cabellos, poco a poco iba adentrándome en lo más profundo del bosque mientras cantaba llevaba un vestido negro de amplias mangas que en su interior eran de color azul oscuro y un pantalón negro también que yo misma había diseñado.

Spoiler:

Estaba acostada debajo de un árbol ya sin hojas, veía hacia las estrellas, estaba ahí sola, mientras recordaba algo de mi pasado.
El día en que me casé con el amor de mí vida, pronto...una sonrisa se dibujó en el rostro, cuando escuché...la voz lejana de lo que parecía ser un canto, el de una mujer, no presté mucha atención, pues lo ignoré, pero al cabo de un rato me entro curiosidad.

Continué cantando y entonces desplegué mis alas y volé hacia un árbol muy alto que entonces carecía de hojas por el otoño, me senté en una de las gruesas ramas con mucha delicadeza y dirigí mi vista hacia la enigmática luna mientras entonaba otra canción un poco más triste que la anterior aun con mis alas a la vista.

Spoiler:

Me levanté inmediatamente, y miré algo con alas, lo sabía por que las plumas habían caído y habían llegado hasta donde estaba yo.
Por lo que miré una figura sentada en un árbol sin hojas, me asombré, y me di cuenta de que se trataba de un ángel, al que no pude reconocer.
Me quedé ahí,escuchando su canción, que me daba cierta nostalgia

Lentamente unas lagrimas descendieron por mis mejillas mientras terminaba de cantar era una canción que me producía mucha nostalgia, después de terminar de cantar permanecí en la misma rama meciendo mis pies arriba y abajo mientras observaba fijamente la hermosa luna y la brisa jugueteaba con mis cabellos.

Hice ruido, sin intención alguna...
La miré y entonces ella se dió cuenta de que estaba ahí, y al mirarla bien, observé que era Victoria, nadamenos que la maestra de música, me sorprendí realmente, tenía unas alas preciosamente blancas y muy grandes

Sonreí al ver a Charlotte, descendí del árbol con un ágil salto y guarde mis alas, parándome frente a ella.
-Charlotte, ha pasado mucho tiempo sin verte- sonreí amablemente.

La miré y después dije- es verdad...entonces...usted es un ángel..- sonreí aún sin poder decir más, y le observé el bonito diseño de vestido que llevaba puesto.

La mire un poco extrañada de que no supiera que era un ángel.
-Así es ¿acaso no lo sabias?- sonreí ligeramente y luego enarque una ceja mientras la veía.

-No la verdad no, y no había visto a uno en su verdadera forma...es lindo- dije sonriente y suspiré.

-Bueno me alegra ser la primera que vez en su verdadera forma- reí un poco.
-Y tu ¿eres una vampiresa verdad?- dije con seguridad pues a lo largo de los años había aprendido a identificar casi todo tipo de criaturas.

Asenti creídamente- claro que soy una...- sonreí de lado y me recargué contra un árbol que estaba a mis espaldas- canta muy hermoso...supongo que usted tiene un objetivo al estar en tierra... si es un ángel ¿no?

Sonreí -Muchas gracias y pues si tengo una misión pero no todos los ángeles que están aquí en la tierra tienen una,sabes...también existen los ángeles caídos que son expulsados para siempre de donde vinimos sin derecho al perdón...- dije mientras alzaba mi mirada hacia la luna.

La miré y noté su mirada con nostalgia...
-¿Eres un ángel caído?- pregunté con cierta curiosidad y me aproximé a escuchar su historia, justo en ese momento, me llegó un aroma extraño, al cual no decidí prestarle importancia.

-No, yo no lo soy solo conozco casos...aunque de cierta manera es extraño que después de tanto tiempo no haya podido regresar...- dije un tanto pensativa y agache la mirada.

Entonces noté su expresión y mejor decidí cambiar de tema.
-¿Que tal su estadía en la academia miss? - dije con mi acento fránces que se me había escapado por un segundo, sonreí un tanto roja, pues había dicho aquello tan extraño.

Volví mi vista hacia Charlotte.
-Todo de maravilla y por cierto... lindo acento- sonreí amablemente.

Me sonrojé aún más- gracias, a veces se me escapa mi antiguo acento...-reí un poco divertida- a mi hermana ya no tanto..-sonreí alegre , pues estaba feliz de mencionar a mi hermana.

-Tu hermana...es Angelique ¿verdad?- pregunte un tanto curiosa.

Asentí- Oui Mademoiselle...-sonreí aún más- ella misma, recién nos hemos reencontrado después de tantos años...-dije alegremente y me lleve las manos a la cintura.

-Me alegra mucho escuchar eso, yo hasta donde se solo tengo dos hermanos pero no los volví a ver, jamas- sonreí un poco nostálgica y luego volví mi vista hacia ella.
-Y creo que a Wolfang también le alegrara la noticia, hace poco me pregunto sobre el asunto...pero entonces solo supuse por los apellidos que eran hermanas, me alegra haber estado en lo correcto- sonreí.

Que pequeño es nuestro mundo, al fin la propia sangre llama a las hermanas...-sonreí y la miré- ¿usted y el director lo sospechaban?- pregunté con intriga.

-No de hecho el no sabia de Angelique... yo fui quien le comente, así que técnicamente yo fui la que sospeche- reí un poco.